En un año diferente surgió la iniciativa de realizar notas a nuestros clientes para conocer más sobre su historia, su actualidad y sus proyecciones. Con charlas distendidas, café de por medio y un Habano para acompañar, se fue dando inicio a una nueva sección de entrevistas. En esta oportunidad dialogamos con Blanca y Lucia Alsogaray, madre e hija, para conocer su historia dentro del mundo del Habano.
En esa época había otro distribuidor de Habanos en el país, pero luego de diversas charlas y de presentar diferentes planes de negocios a Cubatabaco, se pudo crear Puro Tabaco, donde Blanca Alsogaray fue cofundadora. Fue un arduo trabajo de desarrollo de mercado, atendiendo la demanda de consumidores y de tiendas especializadas; ya que hasta ese momento sólo se adquirían Habanos en el exterior.
Corrían los años ‘80 – ‘85 cuando Blanca comenzó a comercializar Habanos en ferias y exposiciones. Este mundo ya le resultaba familiar, ya que su padre era fumador de Habanos, siendo fuente de inspiración para su negocio, convirtiéndose en parte de su vida y de las generaciones futuras de la familia.
Quince años después se reformula el negocio dividiendo la comercialización, surge así en 1993 la Casa del Habano, una franquicia de Habanos S.A. inaugurada en 1991. Argentina fue el segundo país en abrir una tienda de este estilo y la tercera en el mundo (las dos primeras se encuentran en México). En el año 2002, en plan de expansión a los mercados, Habanos S.A. adquiere la distribuidora (Puro Tabaco SA) al igual que muchas otras, en distintos países del mundo. A partir de ese momento Blanca se dedica exclusivamente al desarrollo del concepto de la franquicia.
De la mano de su historia, nos interesaba saber qué es lo que más las apasiona de su negocio, ambas nos hablan de la importancia de la historia del Habano y que con el correr de los años se continue trabajando con mejoras pero de la misma manera. “Es un producto mágico” dice Lucia.
Lucia nos cuenta que tiene dos recuerdos precisos en su memoria de cómo se inició en el mundo del Habanos. Primero el aroma en su casa, que recuerda desde la infancia, y el segundo momento icónico para ella fue cuando, en el medio de una jornada laboral extenuante, se fumó un Habano y entendió profundamente esa conexión de disfrute con el mismo.
Nos comparte un momento muy especial que disfrutan mucho entre madre e hija y es la llegada de una nueva vitola, convirtiéndose en un ritual donde ambas buscan el mejor espacio y tiempo para sentarse, degustar y disfrutar de la novedad.
Recordando diferentes anécdotas quisimos saber cuál es el Habano preferido de cada una. “El Habano tiene su momento” coinciden ambas. Blanca nombra H. Upmann N°2 y Diplomático N°2 como Habanos de su preferencia; mientras que Lucia relata cuando degustó un Bolívar Libertador, producto exclusivo de la franquicia La Casa del Habano, disfrutando de su ligada intensa convirtiéndose en una de sus vitolas de preferencia.
Cuando le preguntamos qué significa La Casa del Habano, Blanca comenta “Es la Casa de los amigos” y continúa contando que es una manera de atender a la gente, donde los clientes pueden disfrutar tranquilamente de sus Habanos. Lucía aporta que, luego de tantos años de trabajo, llegó para su madre un importante reconocimiento internacional siendo Blanca galardonada con el premio “Personalidad del año en Negocios 2023”, premio que se otorga desde hace 20 años y es la máxima expresión del trabajo realizado con esfuerzo, dedicación y amor al Habano. Sólo se entregan tres premios por año en distintas categorías y son sólo 60 las personas que obtuvieron premios de este estilo a lo largo del mundo.
Luego de conocer sobre ellas y su historia pasamos a la actualidad, les preguntamos cómo fue para ellas este 2024 y al unísono nos dijeron “Difícil”. Ambas coinciden que el año fue complejo, con muchos cambios, pero que igual continúan expandiéndose; Lucía asevera, “Crecer en crisis es otro desafío”.
Lucía es una de las pocas en Argentina que ha realizado en Cuba, el Curso Master en Habanos. Éste consta de una formación intensiva donde se aprende todo sobre el mundo de los Habanos, desde la semilla y las plantaciones hasta la comercialización. Este curso único, otorga certificación a nivel internacional. Con diploma en mano, Lucía y Blanca, renovaron las acciones de divulgación en La Casa del Habano y surge así su propia academia de formación, donde brindan Cursos Junior, impulsando así el conocimiento y disfrute del producto. Los cursos son un éxito, asisten aficionados de todo el país y las vacantes se agotan rápidamente. Lucía comenta orgullosa “En el último se anotaron 11 mujeres, dato no menor”.
Continuando la charla, nos cuentan sobre sus acciones para incentivar las ventas. Tienen una dinámica muy prolija y organizada, trabajan anticipadamente y realizan, en general, dos eventos por mes, uno de iniciación al mundo del Habano y otro junto a un producto que traccione, por ejemplo un maridaje de Habanos con un whisky. La premisa de toda actividad que realizan tiene como pilar fundamental la comunicación y la cercanía con el cliente.
Para ir finalizando les preguntamos cuáles son sus expectativas para el próximo 2025 y sin dudar ambas dijeron “Prosperidad y ser positivas siempre”, dando la noticia de que están trabajando arduamente en la apertura de un nuevo local.